Con el triunfo albiazul, más el empate de Maipu la "T" llegó a la cima compartida en el Torneo. Además lo malo fue que gane Santamarina y San Martín, que se prendieron.
Estadio Mario Alberto Kempes, ingreso para socio popular, una vergüenza.
A la cancha el matador, sin Carabajal. Ansiedad mucha ansiedad entre la gente la fiesta era enorme.
Arrancó Talleres manejando los tiempos, llegando con claridad pero sin poder concretar en la red del arquero del Chaira que mediante un cabezazo que despejó bien Aguiar tuvo la mas clarita en lo que se llevaba jugado, a los 34 cuando puso la pelota al piso y la movió al costado tiraron un centro, y el delantero de Racing Oscar Altamirano supo como ubicarse entre Bazzi y Nievas y así con un certero golpe de cabeza que se coló contra el palo izquierdo de Diego Aguiar ponía el 1 a 0 parcial.
En las tribunas se seguía cantando de la misma forma. A los 42 cuando se nos bajaba el telón Bottino y Agustin Diaz armaron una linda jugada que derivó en penal a Klusener, “kluse” lo cambió por gol y al entre tiempo en pardas.
Calentaba Favio Alvarez. Afuera Nery Leyes de buena actuación.
Favio volvió a ser ese pibe atrevido que todos conocimos, de enganche, jugando, entrando en el juego, largándola cuando correspondía, gambeteando cuando lo tenía que hacer. En una linda jugada que otra vez lo tuvo a Bottino como actor de reparto, quedó boyando un rebote del arquero y Favio puso la cifra en el tanteador que sería definitiva. Talleres tuvo para liquidarlo.
Nos podemos ir contentos, empató Maipu, como local.
Parrafo aparte para la actuación de Javier Villarreal, ese volante de contención que todos queremos que sea, se comió la cancha, acá allá y un poquito mas acá también, despliegue, entrega, precisión y mucha inteligencia, anoche a mi parecer, la figura del partido.
Además Agustin Diaz y Favio Alvarez. Desequilibrantes, jugaron y metieron, fueron siempre claros y claves para que Talleres llegara al triunfo.
Ante un gran marco de público, Talleres coronó una buena noche con el triunfo.
Ahora a San Luis, no se sabe si con gente o no, pero los matadores tienen que ir a jugar otra final, para llegar a lograr el objetivo de toda Córdoba menos algunos.
Estadio Mario Alberto Kempes, ingreso para socio popular, una vergüenza.
A la cancha el matador, sin Carabajal. Ansiedad mucha ansiedad entre la gente la fiesta era enorme.
Arrancó Talleres manejando los tiempos, llegando con claridad pero sin poder concretar en la red del arquero del Chaira que mediante un cabezazo que despejó bien Aguiar tuvo la mas clarita en lo que se llevaba jugado, a los 34 cuando puso la pelota al piso y la movió al costado tiraron un centro, y el delantero de Racing Oscar Altamirano supo como ubicarse entre Bazzi y Nievas y así con un certero golpe de cabeza que se coló contra el palo izquierdo de Diego Aguiar ponía el 1 a 0 parcial.
En las tribunas se seguía cantando de la misma forma. A los 42 cuando se nos bajaba el telón Bottino y Agustin Diaz armaron una linda jugada que derivó en penal a Klusener, “kluse” lo cambió por gol y al entre tiempo en pardas.
Calentaba Favio Alvarez. Afuera Nery Leyes de buena actuación.
Favio volvió a ser ese pibe atrevido que todos conocimos, de enganche, jugando, entrando en el juego, largándola cuando correspondía, gambeteando cuando lo tenía que hacer. En una linda jugada que otra vez lo tuvo a Bottino como actor de reparto, quedó boyando un rebote del arquero y Favio puso la cifra en el tanteador que sería definitiva. Talleres tuvo para liquidarlo.
Nos podemos ir contentos, empató Maipu, como local.
“Talleres arrancó perdiendo en 11 ocasiones y fue capaz de levantar 7 de ellas.”
Parrafo aparte para la actuación de Javier Villarreal, ese volante de contención que todos queremos que sea, se comió la cancha, acá allá y un poquito mas acá también, despliegue, entrega, precisión y mucha inteligencia, anoche a mi parecer, la figura del partido.
Además Agustin Diaz y Favio Alvarez. Desequilibrantes, jugaron y metieron, fueron siempre claros y claves para que Talleres llegara al triunfo.
Ante un gran marco de público, Talleres coronó una buena noche con el triunfo.
Ahora a San Luis, no se sabe si con gente o no, pero los matadores tienen que ir a jugar otra final, para llegar a lograr el objetivo de toda Córdoba menos algunos.
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